Diez años desde aquella multitudinaria manifestación

 El dos de febrero de 2014 es un día recordado por todos por la gran manifestación contra los recortes, precedida por otras de los días anteriores y que se celebró coincidiendo con la convención del Partido Popular en la ciudad de Valladolid, que hundió económicamente este país y machacó a los que menos tenían mientras sus miembros se llenaban los bolsillos von el 🤑 dinero de todos. Es robar, robar, robar y robar, además de mentir como bellacos, congelar las pensiones y subir los impuestos. Rajoy fue el peor presidente de la democracia y parecía no tener ni la ESO, como algún profesor universitario que tuve y que es amigo del mediocre Guilarte, que estaría mejor viajando con el IMSERSO y jugando a la petanca.

Unos manifestantes pacíficos fueron agredidos injustamente cerca de un restaurante cercano a la plaza de Santa Ana por decenas de policías, sufriendo alguno incluso lesiones muy graves y además, fueron denunciados por los policías, que parecen fascistas. En un país en el que el escrutinio electoral es público pero se prohíbe entrar a verlo por parte de un impresentable de guardia civil, en el que el antiguo rey robó todo lo que pudo y no le ha pasado nada o en el que no saben quién es Mariano R ni tampoco M Rajoy, todo es posible.

Viva la clase obrera.

Abajo la derecha y la extrema derecha.

Vivan los movimientos sociales.

Viva el espíritu del dos de febrero de 2014.

Vivan los parados de Valladolid y de otras ciudades que asistieron a la manifestación, junto con el resto de personas que nos acompañaron.