Ya no se puede volver atrás

Ya no se puede volver atrás y pago las consecuencias de mis errores y de mi cobardía porque me lo merezco. Ya no se puede volver atrás y lo estoy pasando mal pero me lo he buscado yo, porque he sido un cobarde y me lo merezco. Parece que no voy a aprender nunca y eso que ya soy bastante mayor pero no doy la talla en los sitios, no he estado a la altura una vez más y ya van multitud de ellas. Sed valientes y afrontad los problemas, sin echar a correr ante los monstruos, aunque os hagan daño. Que nunca os vean llorar porque lo vais a pagar caro y tened claro que ante palabras necias, oídos sordos. Cuidado y no hagáis como yo. Hasta pronto. La suerte está con los valientes y con los audaces, pero no con los cobardes como yo.