Días de concentraciones contra la guerra

 El humor y la chirigota de los carnavales ya pasó y la Cuaresma nos recuerda que la Semana Santa no está tan lejos y de hecho, no es difícil ver a cofradías ensayando, porque todo lleva tiempo y el final de un evento supone el inicio del que tendrá lugar el año próximo. Todo lleva su tiempo y llega antes de lo que nos esperamos porque conforme uno se va haciendo mayor, todo parece más corto aunque no lo sea. El primer año en la universidad parece interminable pero no ocurre lo mismo con los últimos. Son años que no vuelven más y que no se olvidan.

La Unión Soviética nunca debió haber desaparecido. Algunas de las republicas federales que formaban parte de la misma hoy en día son parte de la Unión Europea y de la OTAN. La historia de Lituania es dilatada y tuvo un glorioso pasado unido a Polonia a principios de la Edad Moderna pero no ocurre lo mismo con Estonia o Letonia, casi sin tradición nacional. El caso de Ucrania es parecido, con una extensión que nunca tuvo y con una situación estratégica que amenaza a la seguridad de Rusia, lo que no justifica de ninguna forma la invasión de Vladimir Putin. La guerra es algo que debe condenarse siempre, lo mismo que la invasión de Irak por parte de Estados Unidos, Reino Unido, con el apoyo español y de otros países adláteres de los anglosajones.

Muchas ciudades han celebrado concentraciones contrarias a la guerra este fin de semana y todos esperamos que la paz vuelva a Europa pronto, lo mismo que el equilibrio entre ambos bloques: occidental y oriental.