Sorpresas agradables
En medio de la ciudad del Pisuerga se puede encontrar uno cualquier cosa que no se espera y muchas veces sorprendente. Un grafiti bien hecho es una obra de arte y otro mal realizado y en lugar inadecuado, no es más que un acto de vandalismo que atenta contra la ciudad y sus habitantes. En fin, es cuestión de observar por todos los sitios y ver lo que hay por ahí.
Las calles de Gondomar y Rondilla de Santa Teresa rebosan historia y cultura, por lo que no se deberán dejar de lado en cualquier visita turística de la ciudad como la Casa del Sol y la iglesia de San Benito el Viejo, con su escudo que llama la atención al que lo observa atentamente. En la calle ocurre de todo.
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