Día en el que no se vende pan pero en el que hay mucha comida

 La noche de ayer no fue agradable para todos pero sí para la mayoría de la gente, que se reencuentra con su gente tras un tiempo largo de separación pero la comida de hoy supera muchas veces a la cena de ayer y en multitud dr ocasiones supone ir a ver a los amigos y de pasa cometer algún exceso que otro con los dulces en su casa o en la propia si es que sin ellos los que nos visitan, aunque eso es lo de menos. 

Todavía la cuesta de enero está bien lejos y las fiestas no han hecho más que comenzar tras unos días de buenas intenciones que pronto dejarán de serlo, al igual que los propósitos para el año nuevo pronto serán papel mojado o simple humo que se pierde en el cielo para no volver más.

El Olentzero trae los juguetes a los niños de dos comunidades autónomas de nuestro país: Navarra y el País Vasco. No siempre fue bueno y había que dejarle comida y calor en las casas porque su venganza podría ser terrible y lo mismo ocurría en Galicia con el Apalpador y en Cataluña con el Hombre de Muchos Ojos. También en Austria y en otros países extranjeros existen figuras de este tipo pero yo me quedo con Papá Noel, a pesar de que prefiero los Reyes Magos y su cabalgata, que no se vive tanto cuando uno se hace mayor. Espero que Santa Claus os haya traído muchas cosas y no sólo ilusiones, lo que tampoco está nada mal.

Felices fiestas y que viva la lucha de la clase obrera.