Seres de otras dimensiones entre nosotros
Los mamíferos aparecen millones de años después de los reptiles y conviven con los dinosaurios durante mucho tiempo antes de la extraña y repentina desaparición de lis grandes saurios.
Es difícil saber si existió un dinosaurio inteligente, probablemente no lo hubo pero los mamíferos sí que han sabido adaptarse y evolucionar hasta lograr votas de desarrollo insospechadas hace milenios, hace no tanto tiempo.
La física cuántica admite la existencia de otras dimensiones a pesar de que nuestro mundo es en principio tridimensional. No sabemos qué habrá en la cuarta dimensión y puede que seres superiores a nosotros nos observen y controlen desde allí o mejor dicho, desde aquí pero en otro plano. Puede que nos utilicen como lo hacemos nosotros con animales, plantas y minerales. Aquí entra la imaginación de cada uno de nosotros.
Sumerios, egipcios y otras grandes civilizaciones adoraban a los reptiles e incluso los hebreos consideraban a algunas especies inmortales y astutas.
El reptil inteligente sería despiadado, instintivo y carecería de sentimientos humanos. De existir, no querría tenerlo de rival y menos de dominador porque la serpiente emplumada o Quetzalcoatl era un ser despiadado que disfrutaba con sacrificios humanos.
Los castellanos al llegar a América se encontraron con un mundo distinto a la vieja Europa y muchas veces injusto e inhumano. Por eso fueron ayudados por pueblos dominados por los aztecas y los incas, que en unos siglos quizás se hubiesen puesto a la altura de las civilizaciones occidentales y orientales.
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