La reja de la catedral que acabó en Nueva York




 De las Huelgas Reales me voy a dar un paseo por el Esgueva para regresar a la Facultad de Medicina y la Casa de Colón y más tarde a la catedral.

En los años veinte se vendió la reja de la catedral de Valladolid por una cantidad ínfima para proporcionarle el objeto a Hearst, magnate de la comunicación estadounidense pero la crisis de 1929, algo lógico en el sistema capitalista, hizo que no llegase hasta 1956 a Estados Unidos. La fundación Hearst la regaló al MET de Nueva York y allí sigue. 

Vaya negocio que hicimos.  Más chapuzas hizo González Regueral.

Por otra parte, el retablo de la Cartuja de Miraflores de Burgos con la crucifixión de Cristo se hizo con el oro traído por Cristóbal Colón de América en su segundo viaje de los cuatro que hizo a América.

Hasta ahora.

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