Arte antiguo y moderno

 Algo tendrá Egipto que tanto fascina a todo el mundo sin importar la época, ya sea Napoleón, que no fue bien recibido en Valladolid, ya sea Octavio Augusto, que luchó contra los cántabros en el actual pueblo burgalés de Sasamón o bien cualquier turista de España u otro país que queda cautivado para siempre con la belleza del Nilo y la civilización milenaria de Egipto.

El Nilo le da vida a un país maravilloso como el Pisuerga revitaliza esta ciudad. El agua es la vida y sin ella, no hay más que un mundo inerte y desolado, pero no necesariamente antiestético porque el desierto tiene su belleza.

Un crucero por el Nilo siempre es más cinematográfico que montarse en La leyenda del Pisuerga, pero es que no se puede tener todo en la vida.

Somos herederos de Grecia y Roma, pero no se nos olvide que los griegos iban a Egipto a aprende o simplemente a perfeccionar sus conocimientos y qué tal vez la civilización del país del Nilo sea mucho más antigua de lo que nos pensamos.

En el Museo de la Ciencia de Valladolid no han faltado exposiciones sobre el antiguo Egipto.

Sobran la Monarquía y la Guardia Civil, junto con Vox, pero nunca el saber clásico.