No luchar es ser derrotado cada día

 El enemigo atacó de forma rastrera, cobarde y traicionera, pero el atacado huyó como un miserable y un cobarde sin defenderse y sin buscar ayuda, por lo que el agresor venció sin despeinarse, sin quitarse el sombrero, sin casi o sin luchar, mientras que el cobarde ahora es despreciable y despreciado por todos por huir y no luchar. La tranquilidad tiene que mantenerse en momentos de tensión porque el perder la calma puede complicar muchísimo más las cosas y llevar al agredido a la ruina con un desastre total. Si uno no lucha, estará totalmente perdido y no podrá ya remontar lo que no defendió y abandonó como un cobarde y miserable. Se debe prever siempre lo peor y tener un plan "B" porque nunca se sabe uno lo que se va a encontrar en este mundo lleno de intereses y de lobos con piel de cordero. Las apariencias engañan y el cobarde pagará por y para siempre sus errores. Si hubiera luchado, nadie le podría decir nada. Fue mi caso, no luché y ahora sufro una derrota en cada momento de mi vida. Haz lo correcto y lucha por lo tuyo y por tu gente o lo pagarás caro y te arrepentirás. Hasta pronto y feliz verano. De valientes está lleno el cementerio pero a ninguno le podrá nadie tachar de cobarde, que es la mayor de las vergüenzas en este mundo lleno de peligros y traidores.