Los glaciares españoles van desapareciendo

 El caluroso verano nos recuerda a aquel de hace cinco años y no es lo más agradable para las personas. Por lo menos en Castilla y León se puede dormir en invierno pero el tiempo estival ya llega a su fin y dentro de nada hay que volver a la escuela, colegio, instituto, universidad o actividad normal del año. 

Las fiestas son la transición entre el verano y el otoño. Por eso precisamente hay que aprovecharlas al máximo y más tras dos años de parón obligado por razones obvias.

El interglaciar actual entre Wurm y otra glaciación futura se caracteriza por un clima templado en esta región del hemisferio norte y bonitos paisajes asociados pero también esto tendrá su fin. Sólo quedan glaciares en España en la provincia de Huesca y retroceden. Lo mismo  ocurre en el lado pirenaico francés. Todo volverá a la normalidad.

Ceuta es tan española como Burgos, Barcelona, Bilbao, Palencia o León y perteneció a Portugal pero cuando esté país se rebeló contra su rey, Felipe IV de España y III de Portugal, eligió quedarse con Castilla. El gobernador de Tánger prefirió apoyar la revuelta que a la larga se volverá contra los portugueses, protectorado inglés en el futuro o prácticamente. Viva Ceuta, que fue territorio visigodo y si no, recordemos la leyenda del conde Don Julián y la pérdida de España.

La derecha manipula constantemente y aunque los progresistas somos muchos más, ellos juegan sucio y engañan para llenarse los bolsillos con el dinero de todos. No trabajan pero tratan de vendernos lo contrario. Nunca hay que votarles. Son la ruina para España y sólo quieren robar. El PP ha tratado siempre de acabar con las prestaciones sociales, con lo público, con lo que es de todos. Sólo peor para los obreros.