Voló pero volverá
Los globos amenizaron el fin de fiesta y uno de ellos aterrizó en el barrio de Delicias pero también anunciaron el fin del verano y la vuelta a la rutina otoñal. Todo volverá y según nos hacemos mayores, todo se hace cada vez más corto.
Luchemos contra el egoísmo e individualismo de la derecha. Todo va mucho mejor con la izquierda y las fiestas patronales no han sido la excepcional porque han sido mucho mejores que las de principios de siglo.
Septiembre tiene siempre un tiempo cambiante y es ideal para pasear y conocer la ciudad pero hay que sacar tiempo.
La imagen de la calle del Paraíso, Andrés de Laorden y de la iglesia de Santa María Magdalena con globos a lo lejos recuerdan a la hazaña de Juan Sebastián Elcano y Magallanes, cuyo inicio fue en Valladolid, donde el joven rey Carlos I firmó las Capitulaciones con los navegantes. El resto es historia. Tal vez no sabemos vendernos.
Mucho ánimo en estos tiempos difíciles. Por suerte tenemos un buen gobierno al servicio de los ciudadanos.
Localidades de Castilla y León como Portillo (Valladolid) o Astudillo (Palencia) celebran sus fiestas.
El escritor Javier Marías, madrileño e hijo del filósofo Julián, que da nombre a uno de los institutos del barrio de Parquesol, nos ha dejado para siempre pero sus excepcionales novelas ahí quedan para siempre.
Hasta ahora.
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