De lo mejor y de lo peor

 Este año se cumplen ochocientos años desde que nació Alfonso X de Castilla y León, hijo de Fernando III, que dio un gran impulso a la Reconquista, llegando a apoderarse de parte de Andalucía. Granada seguirá siendo independiente hasta finales del siglo XV aunque nominalmente era un vasallo de Castilla, en cuyas guerras civiles intervendrá jugando siempre a su favor y en función de sus intereses particulares.

La herencia de Alfonso X será muy problemática. Su hijo Sancho IV, nacido en Valladolid, será apartado por su padre pero se apoderó del trono en detrimento de su hermano por parte de padre, lo que llevará a que los infantes de la Cerda, don Juan y del Alfonso traten de dividir el reino y buscar apoyos en Aragón y Portugal. María de Molina supo resistir como regente viuda de Sancho IV pero las guerras civiles de la Baja Edad Media en Castilla no han hecho más que empezar. 

El nieto de María de Molina, de la que también se cumplen setecientos años de su muerte, Alfonso XI, derrotó en la actual provincia de Cádiz a los benimerines, pueblo musulmán, en El Salado, actual provincia de Cádiz. El tema del Estrecho siempre fue complejo y los límites con Granada no siempre estuvieron claros pero el reino de Castilla empieza a tener otros problemas, muchas veces internos.