La frontera del Duero
El verano se acaba, pero todavía queda tiempo para que comience el otoño, agradable en nuestra comunidad autónoma, al menos en octubre y parte de noviembre.
El soriano César Calvo Medina estudia con gran éxito en nuestra ciudad y más tarde, se traslada a Boston, ciudad hermanada a la nuestra, en Massachusetts, Estados Unidos para seguir con sus estudios. Lo cierto es que el Duero siempre fue un lugar de frontera entre dos mundos: musulmanes y cristianos, por ejemplo y ahí está la importancia de lugares como la propia Soria, cabeza de Extremadura castellana, Tordesillas, Toro o Zamora, hasta llegar a Portugal. Es un río de grandes historias y protagonista de pasajes rememorables del largo proceso de reconquista, tanto leonés como castellana e incluso portugués.
El río Pisuerga desemboca en el Duero cerca de Simancas, lugar de origen romano y que pudo estar incluso habitado antes. El río ofrece siempre numerosos recursos, aunque también puede ser un lugar lleno de peligros inesperados y destrucción. Me quedo con lo bueno. Hoy por hoy, no es posible bañarse en el río Pisuerga, pero eso es ya otra historia muy diferente. Hasta pronto.
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