Amenofis IV o Akenaton

Los griegos creían que el origen del pueblo egipcio era el Norte de África mientras que los egiptólogos modernos consideran una mezcla entre semitas y pueblos africanos por lo que el elemento asiático sería el dominante. No importa demasiado. Es casi imposible creer que pueblos de la Edad del Bronce aunque ya en una etapa histórica pudiesen construir las tres grandes pirámides o la Esfinge, que hay quien cree que es muy anterior porque presente rasgos de erosión por agua en un lugar desértico como Giza.
La retirada de los hielos probablemente incrementó la pluviosidad en todo el mundo, a lo que seguirán periodos de sequía.
En el Imperio Nuevo, Akenaton impuso una nueva nueva religión de culto a Atón o Disco Solar, en detrimento de los sacerdotes de Amón, que vuelven a coger fuerza con el famosísimo faraón Tutankamón, que no vivió demasiado y debió tener una muerte violenta.
En los tiempos del Segundo Milenio antes de Jesucristo Iberia está en tiempos de la Edad de los Metales y pronto las costas mediterráneas van a recibir visitas de griegos y fenicios en busca de metales. El interior pronto recibirá oleadas de pueblos celtas, conocedores del hierro y que se van a mezclar con los habitantes autóctonos.
Los pueblos de la Edad de los Metales son más belicosos y sedentarios pero sus culturas están muy lejos del gran desarrollo de civilizaciones de Egipto y Mesopotamia. Los pueblos que dominaron el hierro, hacia el 1000 a.C. dominaron rápidamente a sus vecinos. Es el caso de los hititas, que se vieron enfrentados a los egipcios.