Hay quien prefiere el día o la noche propiamente dichos pero el límite entre ambos puede ser difuso y ofrece contrastes entre luz y oscuridad curiosos y atrayentes. Es cuestión de observar.
Los escudos labrados en piedra son muchos, más de los que a simple vista parece uno encontrarse, claro que sí. El de Pedro Lagasca, obispo de Singüenza y Palencia, además de gobernador del Perú, que adorna la magnífica iglesia de la Magdalena no es el único, si bien el más grande de todos, tal vez uno de los mayores de la península Ibérica y que ha sido restaurado no hace mucho, cercano a la siempre visitada por el turista Casa de Colón y el histórico monasterio de las Huelgas Reales, junto a la Facultad de Medicina (no dudéis en visitar el museo anatómico). Es una pena que parte del patrimonio arquitectónico de la ciudad se esquilmase en los dos últimos siglos porque esta zona del Palacio Episcopal podría ser impresionante pero incluso así, es de visita obligada. En la calle de la Rúa Oscura nos encontramos otro escudo curioso pero de pequeño tamaño. Es labor del visitante descubrir la ciudad por sí mismo, es algo más divertido e interesante. Doy la pista de observar el palaci...
O mejor dicho, varias etapas doradas y también el desaparecido equipo de baloncesto de Valladolid, Fórum Filatélico, afectado por los escándalos de su patrocinador pero que tuvo en su plantilla a Sabonis, Homicius y Tijonenko. Los primeros era de Lituania, parte entonces de la Unión Soviética y el tercero, ruso pero nacido cerca de Tashkent, Uzbekistan. Arvidas Sabonis dejó Lituania para venirse a Valladolid y luego ser parte de un Real Madrid de excelentes jugadores para acabar en el Portland Trail Blazers de Oregon, equipo de la NBA donde jugó el mítico español Fernando Martín. Acabará su carrera deportiva en su país pero un hijo suyo jugó en el Málaga y presta ahora sus servicios en los Pacers de Indiana. En 1984 un buen equipo español fue derrotado por los Estados Unidos de Michael Jordan en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles. El de Carolina del Norte volverá a jugar contra España con gran éxito en Barcelona junto con el muy buen equipo estadounidense que se llevó el oro en lo...
Amarga despedida la del material que constituyó nuestra Luna tras chocar la Tierra con un objeto más pequeño que nuestro amado planeta rocoso, tal vez del tamaño de Marte. Nuestro satélite se va separando cada vez más de nosotros y dentro de varios miles de años tal vez ni la Tierra ni su satélite existan. Los viajes a la Luna han pasado de lo literario a la realidad aunque hay quien cree que Hollywood filmó el mayor engaño de la historia. Todo es posible en un mundo como el nuestro, tan increíble y sorprendente como peligroso pero así siempre lleno de vida y en eso nos diferenciamos del resto de nuestro Sistema Solar aunque tal vez Marte fue un mundo semejante al nuestro no hace tanto tiempo. No sabemos qué pasó. Venus es demasiado cálido para albergar vida en su seno y Mercurio está muy cerca del Sol. El resto de planetas son gigantes gaseosos pero satélites como Europa o Titán pueden dar sorpresas a los visitantes terrestres de futuros siglos
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