Marte, lugar sugerente

La contaminación lumínica no dejar ver las estrellas pero en ciertos lugares de la ciudad es posible coger los prismáticos o incluso el telescopio y deleitarse. Los griegos hicieron gala de su imaginación y la aplicaron al cielo. En el hemisferio Sur hay otras estrellas y constelaciones.
Marte se ha identificado con la guerra por su color rojo pero ese mundo de dióxido de carbono y polvo no parece muy apto para la vida.
La desbordante imaginación de Burroughs creó un mundo fantástico en el planeta vecino que se asemejaba al nuestro. Una princesa de Marte es una novela muy recomendable y que ha sido llevada incluso al cine.
A primera hora de la mañana uno puede divisar Venus y Marte, que no son estrellas pero lo parecen. De la Luna habrá tiempo para hablar largo y tendido en otro momento pero hoy no toca, o sí.

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