Fernando II y Sancho III
El tratado de Sahagún entre Fernando II de León y Sancho III de Castilla no surtió efecto por la muerte del rey de Castilla, dejando como heredero a un Alfonso VIII de dos años.
La idea era llegar a la colaboración y posible unión personal entre los dos reinos occidentales más importantes y estrangular a Portugal, que vería frenada su reconquista, pasando los territorios musulmanes entre Lisboa y el Algarve al Reino de León.
Las cosas no salen siempre como se quiere pero será Fernando III quien se proclama en la plaza Mayor de la villa de Valladolid como rey tanto de León como de Castilla.
El tratado de Alcañices ya había fijado la frontera entre León y Castilla, que con apenas cambios, todavía sigue ahí, constituyendo un límite de los más antiguos del mundo.
La unión entre Castilla y Portugal, personal, tendrá que esperar hasta finales del siglo XVI y será por poco tiempo.
Portugal tuvo enclaves en todo el mundo, como la ciudad japonesa de Nagasaki, el más oriental y que se perdió a finales del siglo XVII, tiempos de declive y retroceso para el reino occidental ibéricos, más si cabe desde la rebelión de 1640, que les colocará en la órbita inglesa durante varios siglos.
Feliz día del Carmen.
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